Hay demonios interiores que te obligan a hacer determinadas cosas y demonios exteriores, también llamados amigos, que no te obligan a nada pero te incitan a hacer locuras. Aquí está la mía

miércoles, 4 de junio de 2008

933 vueltas sin volver

Cuando veas el mundo entero destruido a tus pies,
comprenderas que la vida sin mi no tiene sentido,
cuando huyas a toda prisa sin mirar atrás,
verás que tu vida malgastada nadie la quiere.
Novecientas treinta y tres vueltas daría,
para olvidar novecientas treinta y tres veces,
el amor que por mi tienes y no sentirme culpable,
cuando abandonada estes y me busques sin parar.
Ya que nunca te conseguí alcanzar y siempre,
siempre me tuviste a tu voluntad.

1 comentario:

  1. Sin palabras, una poesía lograda y muy bien escrita. También me ha gustado el uso del número 933 de vueltas que darías por olvidar, así como el tema que tratas;)

    Un saludo!!

    ResponderEliminar